Las compras con impacto brindan la oportunidad de hacer extensivo el compromiso con la sustentabilidad, diversidad e inclusión de la compañía a toda su cadena de valor. En ese sentido, una estrategia de compras inclusivas no solo se centra en obtener productos de calidad al mejor precio, sino que también tiene en cuenta aspectos sociales, ambientales y éticos.
¿Cómo podemos llevar adelante una estrategia de compras que contemple esta perspectiva? Compartimos algunos disparadores posibles para el desarrollo de buenas prácticas:
• A la hora de realizar licitaciones, solicitar a los potenciales proveedores información sobre su impacto ambiental y social, así como datos como porcentaje de mujeres, personas con discapacidad, mayores de 45, entre otros.
• Realizar capacitaciones y sensibilización para el área de compras, de modo que comprendan la importancia de estos procesos y los hagan parte de su estrategia de trabajo.
• Contar con un mapeo actualizado de pequeños proveedores inclusivos.
• Evitar recurrir a este tipo de compras solamente para efemérides y fechas especiales. Una gestión estratégica contempla que sean recurrentes y en áreas core del negocio.
• Desarrollar procesos que sean amigables para los pequeños proveedores: tener en cuenta documentación requerida, fechas de pago, etc. Ofrecerles acompañamiento durante las primeras compras realizadas.
• Dar un paso más: contemplar la posibilidad de acompañar el desarrollo de pequeños proveedores a través de espacios de formación, capacitaciones, entrega de créditos, etc.